martes, 21 de junio de 2011

Mala Luna: Tinta juvenil actual, histórica y poética

Tras casi un mes en el escritorio a la espera de que escriba sobre ella, esta obra obtiene el lugar que se merece en el blog.
Muy bien narrada, con buenos enlaces entre pasado y presente, interesantísimos personajes y un innegable espíritu español, la novela narra la historia de Clara y Víctor, dos adolescentes que deben hurgar en el pasado de sus familias para dar con un cuaderno perdido en el tiempo, que podría contener poesías inéditas del poeta cabrero Miguel Hernández.
Ya me parecía prometedor desde su hallazgo, en uno de los tantos stands de la Feria del Libro de Buenos Aires. Sin embargo, al leerlo (y aunque en algún momento me haya parecido algo denso) tuve la certeza de que así lo era. La autora trasluce con éxito el espíritu de lugares y personajes, nutriendo la trama tras cada capítulo. Además cuenta con la increíble capacidad de hacer que el lector se sienta identificado o se encariñe con casi todos los personajes, más allá de que aparezcan poco o mucho. Muy bien hilada la relación entre el pasado y el presente, y la capacidad de reparar los errores que cargan en nuestra identidad; el amor hacia Miguel Hernández y su mundo de poesía.
Este libro me abrió las puertas a dicho poeta y a su curiosa poesía. 
Pero lo que más rescato es la cantidad de espectros humanos, de sensaciones y emociones que trasluce en sus entrañables personajes.  
¡Excelente inicio en la literatura, Rosa Huertas!

Sin duda, el segundo gran hallazgo de la Feria del libro 2011.


Con El Portal de la Sombra y Mala Luna, maravillas de la Feria.


Lo mejor:

-El final inesperado, que me dibujó una sonrisa.
-Los personajes, entre los cuales destaco a Víctor, con el cual todos los adolescentes, en mayor o menor medida, podemos sentirnos identificados; a Cayetana, lúgubre y misteriosa, muy bien representada como un fantasma de la guerra; a Consuelo, su dulzura y bondad que iluminan la historia; a la muchacha que roba el vestido de Cayetana, de apariciones breves pero que incitan a la reflexión; a Aurelio y su mundo de sensaciones.
-La capacidad de transmitir climas y sensaciones con tanta profundidad, como la ciudad en la posguerra, la confusión de sus personajes, sus luces y sombras.
-La fortaleza de la poesía, del escribir, para con la historia y con nosotros mismos.

Lo flojo:

-La rotunda irrupción al pasado de la mano de los escritos de Aurelio, que empiezan siendo densos debido a que uno quiere saber qué ocurre con Víctor y Clara, pero que después terminan enganchando tanto o más que lo anterior.
-El personaje de Josefina, y con ella, el aura de "tiempos felices" en Orihuela, que podría arreglarse para hacerse más llevadero.

Susurros del libro:

"¿Qué puede haber más doloroso que sufrir prisión con veinte años, más desesperado que estar encerrado, aguardando, quizá, la muerte cuando la vida corre por tus venas, más angustioso que saber que la libertad ya no existe ni dentro ni fuera de la cárcel?"

"-La vejez no vale nada para ellos -se decían-, no les interesa lo que tengamos que contarles, no entendemo su idioma ni ellos el nuestro."

"Pero los adultos siempre esconden un fantasma en algún cajón. Muchos creen que lo han olvidado, de hecho lo olvidan, hasta que algún día alguien, o ellos mismos, abren ese cajón en algún descuido y ya no saben cómo cerrarlo."

"-Hace tanto tiempo de esto que ya no os afecta ni os conmueve. También es culpa nuestra, que no lo hemos sabido contar o no hemos querido hacerlo. Todavía vivenmuchas personas que sufrieron esta maldita guerra, que padecieron las cárceles y la represión.
-Pero sólo nos habéis hablado del hambre.
-Porque eso lo entiende todo el mundo."

"-(...) Los jóvenes creéis que está en Internet, que los libros son una especie en extinción. Un libro no se bloquea, ni se borra de repente, ni necesita pilas ni electricidad."

"-(...) Esa es la maravillosa cualidad de los buenos poetas, que nos hacen sentir lo que ellos sienten, que parece que escriben leyendo nuestra alma."

"Abuelo y nieta permanecieron unos minutos en silencio. Su mutismo parecía un homenaje a todos lo que se desvanecieron en el tiempo por culpa de la guerra o la indiferencia, que en muchos casos venía a ser lo mismo. La muerte busca distintos caminos para cumplir sus propósitos, y sabe servirse de los violentos y los mezquinos."

"-A veces hace falta remover el pasado, sobre todo si es para sacar la verdad del fondo."

"-(...) Ahora escribimos tan poco a mano que no conocemos la caligrafía de las personas más cercanas a nosotros."

"-(...) Si le gustaba alguna frase del libro que estaba leyendo, me la copiaba y me decía que pensase sobre ella. Le encantaba escribir cartas. Siempre que me iba de viaje se las arreglaba para que yo recibiese una aunque estuviese fuera una semana. Aquellas cartas me acompañaban, por eso la letra de mi madre ilustra casi toda mi vida."  

"-(...) Eran sus versos los peligrosos, su sueño de ser poeta lo que le hizo odioso a los ojos de quienes no pensaban como él."

"-Si no hubiese ordeñado sus sueños no estaríamos aquí, no habríamos disfrutado sus versos, no leeríamos un poema dedicado a él y no buscaríamos un cuaderno de tapas negras. Nosotros somos los herederos de su sueño, los que mantenemos vivo su recuerdo."

"-Y nunca se sabe adónde nos lleva el camino que elegimos."

"¿Qué somos si nos borran los recuerdos de nuestra vida?"

"¿Quién iba a comrpar una lámpara rota, el cuadro de un antepasado que no era el tuyo, un zapato desparejo o un jarrón sin asas?"

"Allí se aprendía a distinguir entre lo viejo y lo antiguo."

"-(...) Sólo la sangre mancha las manos de los hombres."

"-(...) Siempre te he oído decir que escribir salva la vida, que es tu forma de sentirte vivo."

"-(...) Sé que convertiré mi rabia en versos cuando la pena me deje respirar."

"Corría el mes de enero cuando acudí a visitar al preso que un día fue mi amigo."

"Le había comprado un cuaderno de tapas negras. Él llenaría sus hojas de versos hermosos, pero su color era negro, como la oscuridad de la noche en soledad, como los malos presagios, como el luto."

"La poesía me hablaba, a mí, en cada página y en cada verso que escogía al azar (...) No pude continuar; me mordí el puño con tal rabia que sangré y mi sangre se mezcló con mis lágrimas." 

"Las palabras que marcan nuestra vida se quedan grabadas como un eco de campanas (...)"

"Comprendí que el pasado me perseguiría siempre y que es imposible esconderse de él."

"¿Dónde guardarías un libro para que pasase desapercibido?"

"Comenzó el ritual, y las páginas dormidas se fueron despertando a la luz de la lectura de Clara."

"(...) no había tenido en cuenta que los personajes del pasado seguían viviendo en el presente reflejados en ellos dos."

"Sólo los grandes poetas consiguen que nos asomemos a nuestra alma y nos devuelvan la imagen de lo que somos."

"Todas aquellas caras me miraban con ojos de difunto y yo habría dado cualquier cosa porque estuvieses allí, para consolarme en mi desconsuelo y para que borrases de mi vista todas aquellas miradas vacías."

"Le dije que mi amigo estaba interesado en saber más cosas sobre su abuelo, al que apreciaba mucho pero del que nadie le había hablado."



3 comentarios:

  1. Hola Zon:
    Gracias por el excelente comentario a mi novela. Soy Rosa Huertas, un amigo localizó tu blog. Veo que has leído con detenimento la obra y has entrado en la claves de la historia. Te diré que el personaje de José Castillo es real, era el padre de una amiga, y estuvo en la cárcel con Miguel Hernández. Tengo otra novela publicada en Edelvives en Argentina, se llama "Tuerto, maldito y enamorado" y creo que también te gustará. Si la lees, ya me contarás. Un placer conocerte.
    ROSA HUERTAS

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  2. Hola! ¿Existe la versión de Mala Luna en inglés?

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    1. Hola! la verdad no tengo ni idea, pero el libro originalmente es español. abrazo!

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